¿En que consiste la esterilización?
En hembras consiste en retirar ambos ovarios y el útero, esto se realiza con cirugía bajo anestesia
general. Normalmente la operación es muy rápida y requiere de pocos cuidados después de la
cirugía.
En machos consiste en retirar ambos testículos, es una cirugía muy sencilla para el médico
veterinario, la recuperación es muy rápida y las complicaciones son muy raras.
¿Le dolerá a mi mascota la cirugía?
Como cualquier procedimiento esta cirugía puede ser dolorosa, pero se realiza bajo anestesia
general y se utilizan medicamentos para evitar las molestias asociadas a la misma. Después de un
par de días las molestias desaparecen.
LOS RIESGOS REALES DE LA ESTERILIZACIÓN:
Como todo procedimiento quirúrgico y anestésico hay riesgos, pero estos se ven asociados a la
edad del paciente, estado de salud, sensibilidad a los medicamentos y anestésicos utilizados, así
como la habilidad del medico veterinario e instalaciones disponibles para realizar el procedimiento
adecuadamente. Normalmente el riesgo en un perro sano y joven es extremadamente bajo. Esto no
quiere decir que si tú perro es viejo no lo debes de esterilizar, pero probablemente requiere de
cuidados anestésicos mayores y una evaluación pre-quirúrgica amplia. En nuestro hospital
esterilizamos perro y gatos de todas la edades incluyendo de edad muy avanzada.
En algunos perros esterilizados el metabolismo se ve disminuido y el proceso de las grasas se ve
alterado causando predisposición para subir de peso, sin embargo una dieta adecuada así como
mantener el nivel de actividad recomendado para la raza y edad de tu mascota puede evitar este
problema.
Existen reportes en los que relacionan la esterilización en las perras con incontinencia urinaria. Sin
embargo esto no se ha comprobado y la incidencia es muy baja (2% aproximadamente, similar a la presentación del problema en perras no esterilizada.) También existe un riesgo muy bajo de que la
perra no desarrolle a vulva, permaneciendo infantil causando irritación de la piel que la misma,
obviamente este no es un problema serio. Tomando en cuenta los riesgos de no esterilizar, estas
complicaciones potenciales son justificables e infrecuentes.
¿Cómo cuidar a mi perro después de una cirugía de esterilización?
1. Lleva
a tu perro a casa tan pronto como sea posible. Cuando se esteriliza a un perro,
el procedimiento quirúrgico se lleva a cabo típicamente en la mañana. Excepto
con cualquier complicación después de la cirugía por la anestesia general, el
perro usualmente será enviado a casa por la tarde. Asegúrate de confirmar las instrucciones de cuidado con el veterinario y aclara
cualquier duda que tengas en ese momento.
2. Ayuda
a tu perro para que salga del automóvil cuando
lleguen a casa, pero evita levantarlo para que la incisión no se rasgue. No
dejes que el perro salte; esto puede dañar los puntos de la incisión fresca.
Recoge a tu mascota de la oficina del veterinario con un vehículo del tipo
sedante en lugar de uno utilitario deportivo. Esto le facilitará al perro
entrar y salir del automóvil. También puedes usar un cargador de mascotas
para perros más pequeños.
3. Ayuda a tu perro a subir las
escaleras. Después de una cirugía con anestesia general, el animal estará aturdido
y tendrá poco equilibrio. Esta falta de coordinación puede hacer que sea
difícil para el perro subir escaleras, así que deja que lo haga lentamente y
mantente detrás de él mientras sube. Estate preparado para atraparlo si
tropieza.
4. Acompaña
a tu perro hasta su cama o crea una cuando llegues a la casa. Lo más probable
es que el perro se vaya derecho a dormir. Raramente un perro tiene un nivel
normal de energía. Este tipo de perro tendrá que mantenerse en una jaula para
permitir una recuperación apropiada en las horas después de la esterilización.
Dale a tu mascota medicamentos para el dolor, como
también pomada de betadine, siguiendo las instrucciones del veterinario.
5. Aísla a tu perro de otras mascotas y
niños. Un perro que ha sido neutralizado hace poco experimentará un poco de
dolor y malestar, particularmente si todavía tiene los efectos de la anestesia
La anestesia puede hacer que los perros se sientan desorientados por un período
de 18 a 24 horas después de la cirugía. Estos factores harán que un perro sea
más propenso a gruñir y morder a otros perros, al gato de la familia o incluso
a un niño. Evita que el perro muerda después de la cirugía al mantenerlo
aislado mientras se recupera durante esas primeras 24 horas.
6. Ofrécele una comida blanda a tu
perro. Dale una comida blanda casera, como arroz blanco normal, pollo sin piel
o una hamburguesa cocida con la grasa apartada. Dale media o dos tercios de la
cantidad normal de comida para prevenir un malestar estomacal. Esta comida
blanda casera tentará al perro a comer, pero la comida también será suave con
su estómago. Recuerda, la anestesia hará que el perro tenga náuseas. También
recuerda que el animal no ha comido por 24 horas. Esto resulta en la
acumulación de ácidos estomacales que pueden alterar el revestimiento del
estómago, haciendo al animal más propenso a vomitar y a tener náuseas. Si tu
perro no quiere comer la noche siguiente a la cirugía, no lo fuerces. Es común
que un perro rechace la comida después de haberlo esterilizado.
7. Saca seguidamente a tu perro: cuando
se administra la anestesia, al perro se le proporcionará con fluidos
intravenosos como una medida de apoyo. Lo que entra tiene que salir, así que el
perro necesitará orinar frecuentemente después de la cirugía. Más o menos cada dos
o tres horas, lleva a tu perro afuera con correa para que haga sus necesidades.
Es importante notar que un perro que se ha puesto bajo los efectos de la
anestesia va a dormir profundamente, así que algunos perros pueden orinar
mientras duermen en las horas siguientes a la cirugía. Otros perros que
usualmente avisan al pararse junto a la puerta podrían no hacerlo. Así que
anticipa las necesidades de tu perro y llévalo afuera más seguido de lo normal.
8. No le quites el collar isabelino. En
la mayoría de los casos, un perro que ha sido esterilizado se enviará a casa
con un collar isabelino. También se le llama "cono" o
"lámpara". Tienes que mantenerlo con esto puesto hasta que la sanación
esté completa para prevenir que el animal se lama la incisión quirúrgica.
Mientras que el perro se cura después de la cirugía, la incisión empezará a
picar y el animal se puede quitar los puntos prematuramente. Así que es
importante mantener el collar isabelino puesto hasta que se remuevan los
puntos.
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